Iglesia Parroquial de Santa Cruz
Está edificada en ladrillo y mampostería. Su planta es de una nave, dividida en tres tramos cubiertos con bóvedas de aristas. A los pies está instalada la torre y el coro de la misma. En el interior se pueden ver tres retablos del siglo XVIII. En ellos hay imágenes de Cristo crucificado, santa Magdalena, santo Tomás y san Antón. La pila bautismal es románica.
Presenta planta de una sola nave cubierta por bóvedas de crucería soportadas por pilastras y rematada por una cabecera abovedada de mayor altura interior situada sobre el presbiterio, un coro construido en madera cierra el extremo oeste de la nave principal. A los pies del templo se sitúa una espadaña de origen románico construida en piedra de sillería.
A los muros de la nave principal se adosan dos cuerpos de inferior dimensión: al norte un volumen conbierta a un agua que alberga la sacristía, la pequeña capilla de la pila bautismal y dos espacios para almacenaje a los que se accede únicamente desde el exteior; al sur se sitúa el atrio porticado que sirve de acceso al conjunto, presenta una bóveda en su tramo central justo delante de la portada de la iglesia, un almacén remate el atrio por el este, por su extremo oeste una puerta de paso a la escalera de acceso al campanario.